Cerca…
de este frío en el alma,
aun cuando una hoguera me abrasa,
mi espíritu gélido
es árido en la oquedad
de este absoluto espacio.
Entre las esquirlas
me busco a mí misma,
al amparo del silencio.
Me complace este éxtasis
que se escapa del alma,
primera vez que me hago feliz.
Sin melodías ni rosas,
solo mi respiración y yo
dulcemente aletargadas.
Florezco entre las luces
esplendorosas del tiempo,
sin recuerdos ni frustraciones.
Brilla la esperanza,
se derriban los altares,
surge un nuevo comienzo
sin santos ni mártires,
solo siendo plena
atada al amor que nace de mí.