¡Filósofo el albañil!
que construye torres hacía el cielo,
para después terminar él
viviendo en el mismo suelo.
¡Filósofo el agricultor!
que se levanta temprano,
para procurar el alimento
a quienes madrugan de vez en cuando.
¡Filósofo el boxeador!
que derrocha violencia y puños,
con el único propósito
de darle paz a los suyos.
¡Filósofo el zapatero!
que procura tener conformes
a quienes por ser burgueses
ven en los zapatos sus uniformes.
¡Filósofo el carpintero!
que se desvela en perfeccionar
los muebles pa\' los de arriba
y en los que él nunca se sentará.
¡Filósofo el futbolista!
que gana millones por un gol,
mientras quienes le pagan
ganan acaso para \"el hoy\".
¡Filósofa la mujer!
que pone precio a su cuerpo,
si ningún hombre tiene para pagar
un solo minuto en sus aposentos.
xE.C.