carloszalameao

Ahogándonos

El lujurioso día tentó a la noche marcando un paso en la historia,
las trompetas suenan recordando el suceso de la derrota,
¿dónde van las manos a parar o dónde fueron cuando yo no estaba?,
tentaste tu corazón y tu piel desvaneció tu alma.

Camuflada palabra tras la lengua vil que derramas,
acaricias mi tiempo y no escondes tus garras,
sentido o dolido marcado en el pecho,
augurio o lujuria los daños que has hecho.

Perdono la desdicha por ser tan ingrata,
olvido tu recuerdo y memorizo la hazaña,
espina en el pétalo mas no en la rosa,
quemaste inocencia ahogándonos en prosa.

Lo repito en silencio detrás de la puerta,
golpeo y golpeo para olvidar la escena,
mil grietas surgen como lagañas,
en la noche es la sal y en el día es la nada.

Pdta.: Arrancare mis ojos de sus cuencas y lanzare el recuerdo a las bestias, bestias con nombre del firmamento, tú y tu delito son mi desprecio.