Al despertar te veo con los ojos dormicerrados...
Te escucho por unos segundos y la ilusión pronto se desvanece
Volvés al atardecer con mis lágrimas y la luz del poniente
Tu voz en la noche acompaña el espejismo
Una ilusión casi tangible
Aún más triste cuando te vas
Ya no hay ni luz ni poniente
Solo lágrimas
Noche en desvelo
A espera de un nuevo amanecer