Entre nubes de algodón, nos encontramos hoy.
Un sentimiento extraño nos invade,
realidad o ficción?
De golpe mi corazón late, mis pupilas se dilatan.
En una fracción de segundos, mi cuerpo pide a gritos
que me acaricies, beses, que tus manos recorran mis cabellos, mi rostro.
Y sigue, avanzando lentamente a la fragilidad de mi pelvis, dame placer…..
Recorre mi espalda con tu boca entreabierta dejando tu miel en mi piel.
Hazme tuya, apodérate de mi, que frágil estoy aquí bajo el peso de tu cuerpo
y atrapada entre tus brazos que me excitan cada vez más al sentirme
presa de tu sexo, ya te siento, el calor invade mi interior.
Como corrientes de aguas termales, como fuego de la hoguera.
No te muevas déjame gozar de esta sensación.
Ahora tú me pides, que me mantenga a tu lado, solo para sentir,
mi piel contra la tuya.
Exhausto estamos, así amaneceremos y ahora entre nubes estas tú,
a la esperas ansioso la noche para sentir mi aroma a mujer.
Porque mi sexo te enceguece, embriaga y nos damos cuenta que la
ficción de esta fricción se volvió realidad.