Fexcalini

FACETA


Tengo tantos rostros de ti y todos ellos


Son los lenguajes de la tierra a través de tus ojos.


Debí conocerte de día para así aprenderlos,


Y  detener la gangrena


Que provoca el fraude de las horas


en mi corto existir.


Y no tuviera yo, ahora, el cargoso,


El de tulipán mohecido,


Ese que desvanece tu retrato.