Escribo para no morir
Para sentirme
Sentir que algo cruje en mi pecho
Desde una cama blanda
Y un corazón duro
que a fuerzas se ha cubierto de metal
Para aguantar las embestidas de la vida
Escribo para no vivir
La vida corriente de la mayoría
Y habitar mi propio mundo
A veces gris y celeste
Donde las noticias no tocan mis oídos
Y la realidad me toca por sorpresa
Me preguntan en qué planeta vivo
Por supuesto que respondo en el solo mío
Puede parecer un gesto egoísta
Pero he sucumbido a la brisa cálida de la soledad
Ese viento veraniego que refresca las heridas
Y te devuelve el aliento perdido
Definitivamente escribo para recordarme a mi
La historia que soy, que seré y que ya he sido.