Hay solo pánico en tu sombra,
hay solo temor tras tu rastro,
lo sé, porque ahora soy sobras
de miedos convertidos en pasto
Tal vez esté en lo cierto
aquél que dice que no lo merezco,
pero de merecer mejor no hablar,
pues soy yo el que decido
por cual de todas mis heridas
vale la pena sangrar
Y si vale la pena alguna herida,
esa eres tú,
y si pudiera repetir una caída,
esa eres tú...
Sin lugar a duda
Porque no existe sonrisa
que me rasguñe el alma como la tuya,
no existe tiempo mejor invertido
que el compartido contigo
Y sin embargo dueles
Dueles porque eres ausencia
en los días en que el recuerdo abraza,
en las noches que no he vivido,
en las vocales de mi esperanza
Dueles porque eres el motivo,
la razón en la que creo
en la guerra a la que defiendo
cada noche contra el olvido
En la insensatez absoluta,
la gente me pregunta;
¿Si tanto duele, por qué quererla?
¿Por qué la esperas?
Y los entiendo pues ellos desconocen
lo bien que dueles
No hay dolor mas placentero
que el que me causas cuando sonríes
No hay caricia que duela tanto
como esa que pides y no recibes
Y no es que duelas por doler,
más bien, dueles por no saber,
por no saber cuando vuelves
Porque lo harás, lo sabes bien,
y aunque duela, yo sé támbien,
que volverás y ahí estaré,
por eso y más, dueles
Y cuando vuelvas,
ojalá sea en hora,
porque es una pena
que para el que puntual llega
aunque sea corta la espera,
siempre es tarde
Y perdón si entretanto
del dolor hago alarde,
pero lo conozco tanto,
que no me viste grande
No dueles de más, ni de menos,
dueles en la medida exacta,
a medida que ya no estás,
a medida que no nos vemos
No dueles en la distancia,
mucho menos en cercanía,
dueles,
por lo lejano de tu estancia
estando tan dentro mía
Dueles en tu simpleza, dueles
en tu fragancia, en tu inocencia,
en la ignorancia de tu grandeza,
en cada paso que no hemos dado,
en lo perdido, en lo ganado,
en todo eso y más, dueles
Duelen tus labios
ahora que no me besan,
duelen tus manos
pues no me tocan,
en mí, duele
lo que provocas
al sentirme libre
siendo tu presa
Dueles,
porque tu cuerpo tal vez desnudas,
pero tu alma nunca,
dueles siendo tan hermética,
tan fantástica, tan magnética,
tan estática en mi nuca,
por eso y más, dueles
Dueles porque alguno podrá quererte,
pero seguro no le dolerá perderte
como a mí hoy me dueles
Normal, no están todas las sienes
preparadas para entender y apreciar
el valor que tienes,
no es un valor material, ni existencial,
ni siquiera circunstancial,
es por el valor de hacer sentir afortunado
a la persona que está a tu lado
Si de algo estoy convencido
es de si de todo lo vivido
el amor en dolor se ha convertido,
ya no estoy enamorado, estoy dolido
Si de algo estoy aterrado
es de si decides irte y no volver,
del daño que logrará herirte al ver
el anhelo por ser feliz
Si la felicidad duele, eres felicidad,
si no lo hace, támbien lo eres
Al igual que los polos opuestos se atraen,
me amas y me repeles
Y duele, joder, duele!
Porque es una de esas cosas
que solo ocurren una vez,
como el nacer o el morir,
que duele porque no se repite
Y tanto que dueles,
dueles porque en mí estás tan dentro
que no hay color que observe ahí fuera,
dueles porque de mí estás tan lejos
sin embargo te siento en mí bien cerca
Que irónica la vida,
la gente que me quiere
solo me dice que te olvide,
y mi corazón que te quiere
que no lo haga me pide
Y mientras tanto yo... pienso,
pienso en ti y sonrío,
me miento y tu recuerdo abrigo
Y mientras pienso en ti... lloro,
me descalzo del sueño roto,
y peino el recuerdo que compartimos
Y pienso en ti, y sonrío,
y lloro...
porque dueles