Carlos Eduardo

S E R I A M E N T E

 

Estoy cercano al invierno donde se terminan las estaciones sin importar el hemisferio en que uno se encuentre, allí empieza la odisea del espíritu, lugar de combate de antiguos gladiadores, todo tipo de guerreros, unos rápidos de pie ligero, otros grandes tiradores,... que eterna travesía sin tiempo y sin espacio, nada plena.

 

 

Río gozoso en alma y espíritu,

he descubierto las llaves para

vivir,

tempranamente,

la libertad, la bondad, la solidaridad,

el amor, la serenidad ante la adversidad,

reconocer de una plumada

a mis pares,

esfuerzo y perseverancia con voluntad inquebrantable,

no perder la espontaneidad,

ir por el estrecho camino de lo correcto,

puedo irme en paz

a la nada invisible

sin tiempo

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IRREVERSIBILIDAD DEL DEVENIR

 

Todo cambiará en un instante,

así funciona el universo

en sus infinitas modalidades,

por eso yo sé 

de la mutabilidad de la estructural social, 

los factores intervinientes son indeterminados,

su inestabilidad permanente

es el escenario adecuado,

siendo irreversibles todas las nuevas formas,

prevalecerán unas pocas finalmente;

 

hoy vivimos la revolución del lenguaje;

 

no serán la lucha de clases,

los dioses, las religiones,

las ideologías ...,

sino algo impensado

el detonante,

para bien o para mal

o peor ...

 

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