En endilgarle un grillete
inútil es el empeño,
condicionar proporción
es de criterio pequeño.
Válgase la analogía
en los temas del diseño,
querer hacer enojar
a ese chiquillo risueño.
Con un versar soberano
que da libertad a un sueño
del hosco oriundo del norte
y del pícaro sureño.
Lo mismo brinda consuelo
al albino que al trigueño,
al misántropo ermitaño
y al generoso costeño.
Rabiosos los egoístas
amagando con un leño
sin aceptar la premisa:
“la poesía no tiene dueño”
@MucioNacud ©