Sueños marginales,
en las noches de agonía,
donde la demencia es la frase,
que acontece a cada día.
Sueños marginales,
despertares y desdichas,
donde el invierno es crudo,
como mi carne, como mi vida.
Sueños marginales,
voy siempre por la misma vía,
donde mi sombra se pierde,
distante entre la neblina.
Sueños marginales,
despertares de malicia,
donde ya todo está muerto,
sin esperanzas, sin alegría.