Busquemos algo importante
para poder conversar,
algo que tenga sentido
en el fondo de la mar,
de la vida, de la muerte,
de la hora de rezar,
palabras que nunca digo
aunque todo salga mal.
Busquemos alguna historia,
algún cuento sin hablar,
algo que lo mueva el viento,
algo que nunca verás,
algo que se dice afuera
sin saber cómo escuchar.
Busquemos paz en la tierra,
en mi vida, en este hogar,
en las mañanas sin gloria,
en las noches de placer,
en las pavadas escritas
con tinteros de mentiras
cuando me des tu querer.