Alfredo Saez

-El Sauce Llorón-

 

Como en la nuca el golpe de un caño

así cayó la traidora violencia cerril,

clandestino desamor del engaño,

infidelidad de árido ciento por mil.

 

Parece mentira que besos de almíbar

dulzores de todas las quintas frutales

quedaron de pronto en olvido caníbal,

querencias fugadas por los pastizales.

 

De pronto vuelve el cretino recuerdo

pidiendo en húmedo silencio perdón:

apóstata que medita en el sauce llorón.

 

El río arenal sigue su ritmo fluvial

muy oculta la verde playa prohibida

…que besos fueguinos pactaron salida.