En una casa de adobes
enclavada en el cerro
lejos de la ciudad
y muy cerca del estero
Cómo en arcón de madera
salían bellos recuerdos
en sus murallas blanqueadas
en casa del bisabuelo..
Un escritorio antiguo
con tapa de bronce un tintero
una lapicera verde
con su pluma de acero.
Unas hojas amarillas
con un saludo de cumpleaños
que ahora son más de cien
del siglo recién pasado.
Dos manchones de tinta
por dos lágrimas derramadas
era la antigua misiva
del bisabuelo que no estaba.
Sobre el mármol rosado
una medalla estrellada
en honor del salvataje
no siendo en gran batalla.
Sino salvar a tres niños
que en el estero se ahogaban
él solo hizo un guiño
cuando a él lo condecoraban.
Una foto en un marco ovalado
el bisabuelo con capa morada
con un zorro muerto en la mano
del que mi abuela contaba.
Murió de un gran empacho
por comerse las gallinas
y un gallo semi emplumado,
que nunca había cantado.
La bodega de la casa
tan obscura como la sombra
como si quisiera hablar
de las cosas que se nombran.
Embudo de vieja lata,
una gamela redonda
un barril algo guatón
y una tinaja embarrada.
Veía a mi abuela emocionada
como si ella estuviera
viendo sus pavos en bandadas
llegar volando a sus plantas.