Un paso primero
luego otro más... ¿a dónde iré?
Necesito una oscuridad profunda
que apague la luz de tu recuerdo,
necesito un silencio absoluto
donde no oiga los ecos de tu voz.
Ilusión vana que ni la muerte puede remediar.
Arrebato, desenfreno, melancolía y flema,
la locura es mi salvación.
¡Otra ilusión!, si cuando te ví perdí la razón.