Me enseñó Don Cañabate
(Quinteñas Husseñas)
A jugar me enseñó Don Cañabate,
invitándome a un mate,
colocó en su lugar a los peones,
después la realeza,
blancas, negras, sitúa cada pieza.
Alfil que les protege , con bastones,
caballos, torreones,
me dijo; moverás primero cuate,
saqué mi gran nobleza,
moví el peón, ¡ quedó sin su cabeza!
Qué buen pago a mis malas decisiones,
pensaré mis acciones,
mi caballo saltó con gran certeza,
cometí un disparate,
no esperen que en detalle les relate.
No esperaba que así me lo arrebate,
corazón que no late,
Cañabate disfruta su proeza,
presumiendo de dones
desató enfurecidos mis leones.
Saqué mi reina, frágil sutileza,
y lloro mi torpeza,
al ver tanta crueldad del ruín combate,
fallaron ecuaciones,
pero guardo un alfil en los bastiones.
Llegados a este punto soy quien reza,
mas perder no es bajeza,
ganaré con mis curas gordinflones,
por más que me maltrate,
no entendió que le puse en jaque mate.
Dolores Egea ( Lolaila)