Quiero ser luz y matar la luna negra
Saciar la lengua de las sombras
Sére el póstumo rayo que resucita la aurora
Quiero verte despertar en mi pecho
Sentirte fundido, como hierro y hoguera
Tus piernas y brazos, soldados a los míos
Sin heridas ni penurias, sin penitencias ni amarguras
Voy a matar a la luna de boca negra
Con tus barros penitentes me haré álfarera
Las lágrimas gangrenadas de tus ríos
Me las beberé como roció de nuestras auroras
Llora amor no tengas miedo,
de expulsar la hiel salada.
Esa hiel que sabe a cárcel,
Amarga, fría y solitaria.
Llora amor llora en mis brazos,
Llora amor seré la leña,
donde se abrasen tus lágrimas.
Me convertiré en océano, yo recogeré tu llanto.
Cuando el brazo del silencio,
descargue pena y quebranto.
Yo voy a ser un escudo,
Para amortiguar ese látigo.
En la espiral que te lleva,
Iré pegada a tu espalda.
Para llorar a tu lado,
cuando el bucle de la desesperanza,
venga buscando tu centro,
tendrá la plaza ocupada.