Te recuerdo gran amigo maestro, del arte
de expresar con figuras coreográficas tus sentimientos
Victoriano, el cholo, "el artista peninsular",
el que todo lo da, el que no le pone precio a nada
ni a su arte, ni a su alma ni a su tiempo.
nunca tomaste conciencia de tu valía,
como artista y como ser humano.
sencillo, alegre , y siempre mal pagado
por los que quisiste tanto, tus discipulos,
que con el tiempo te abanonaron y te dejaron solo.
Cuando más de ellos necesitaste , solo cuatro
estuvimos a tu lado, de los cientos
que por el ballet pasaron , pero como un guerrero
te incorporaste y por encima de todo los perdonaste,
Ah Victoriano, mi maestro, como quisiera hoy
armar otra coreografía, y llevarla a los escenarios
que tanto nos aplaudieron antaño. una danza ancestral
que sea de la costa, de la sierra o del oriente.
y que motive aplausos, y felicitaciones como antes.
Ir por todos los pueblos con los atuendos coloridos
confeccionados por tus manos de artesano,
y vender las muñecas con trajes folclóricos
que elaborabas en tiempos de descanso.
Ah Victoriano, el artista sencillo, el artista del pueblo
el que nunca se negaba a una presentación,
por muy distante que fuera y sin ninguna paga
tan solo el transporte pedias, y tal vez un refrigerio,
y llevabas lo mejor qu tenías, siempre alegre.
Ya tus pasos cansados , ya tu cuerpo enfermo
no siguen el camino y las coreografías
dormidas se quedaron en el baúl en que guardas
los trajes coloridos, esperando que alguien,
los pida de prestado, para personalizarte
llevándolos tú mismo, Ah Victoriano
para mi tú sigues siendo grande.