Arek Owens

Tan solo una

Quiero una,

aunque te resulte atrevido y tus ojos se manche con los destellos de mi desquicio.

Que me mires y reniegues, que con el pensamiento me alejes. Y aún en lo más sincero y inocente, digas: que locura. Pero quiero una.

 

Una que calme mis dedos estirados, cual garras que se aferran desesperadamente, inmunes al rechazo.

Una caricia lente, deliciosa.

Una traviesa, de las que te hacen temblar el alma.

Una que solo busca la calidez y el tacto,

Solo quiero una.

no importa su forma y duración,

Solo quiero una.

Solo una y sé que todo estos años en sequía, valieron la pena.

Porque no te pido que me ames, ni que des la espalda a tu persona.

Solo quiero sentir tus dedos, solo quiero sentirlo ahora.