\"Me pregunto cada segundo/ que tan confundido viví,/ si será que no entiendo al mundo/ o el mundo no me entiende a mí\".
No me gusta trabajar, nunca lo hago,
prefiero pedir dinero y que me den…
Si acaso me notan mi cara de vago,
yo igual les pediré dinero también.
No me agrada eso de bañarme a diario
ni me afeito pues me da mucha pereza,
tengo un olor a zorrillo extraordinario
y también algunos piojos en la cabeza.
Me levanto casi siempre a mediodía
y no quiero salir a buscar empleo…
El peine jamás me hace compañía
y no me importa nada verme feo.
El aliento me huele mal, a rayos;
total, la higiene no está en boga.
La plata me la gasto en caballos
o con los amigos comprando droga.
Si te veo por ahí de noche te asalto
y no me da ningún miedo ir preso,
no me importa si eres bajo o eres alto
…y en prisión tampoco notan eso.
Ah y si acaso descuidas tu cartera,
yo voy muy veloz y te la arrebato;
puedes protestar todo lo que quieras,
que yo contigo jamás haré trato.
Y si me ofreces algo de comida
y es tuyo todo lo que me llevo,
puedes darte desde ya por perdida,
seguro estoy que te atraco de nuevo.
La oscuridad es cueva de lobos,
evítala si acaso me ves cerca;
si eres víctima de más robos,
yo te lo advertí y fuiste terca.
Si tienes una hija que es bella,
recomiéndame en tus poemas;
tranquila, si me mantiene ella,
nos podemos casar sin problemas.
Si sientes ante mí sólo indiferencia
y mi situación no te da calor ni frío,
mira cómo disfruto mi experiencia
por ahí, ya sabes, fumando lo mío.
Nadie cerca de mí me aconsejó…
y mi historia nadie la sabe ni me la pide,
seguro por escrito te la contaré yo,
pero la lees - eso sí – después que me suicide.
Original de Álvaro Márquez
Caracas, Venezuela
Derechos reservados
Libro: http://goo.gl/YYLd72
Correo: [email protected]
Twitter: @poreros
Imagen: de Google