Tarde en la noche te llame para decirte que te quería,
Que te quedaras a mi lado para ver juntos la luna salir,
Y como caen las estrellas allá a lo lejos
como si un viento fuerte las despegara del cielo
cada vez que me acordaba de ti.
Y me respondiste que nos veriamos al otro dia,
Tal vez al mediodía, para que te contara de mis esperanzas,
De mis ganas de sentir tus besos,
De acariciar tu cuerpo mientras te digo que te quiero,
A pesar de que no estabas segura de lo que sentías por mi.
Para después vernos una tarde de marzo,
Y sentir tu mirada enamorada otra vez sobre mis pupilas,
Como si el amor nos hubiera tomado por sorpresa,
Y el clima templado te hubiera hecho cambiar de parecer,
Quedándonos como parados en el tiempo
al probar otra vez la miel del amor.
Que nos entra por las venas hasta llegar a nuestra mente
Y en un instante yo fui tuyo en la oscuridad de la noche
Y tu sentiste que eras mia al sentir mis labios entre tu boca,
Como si se hiciera realidad nuestro sueño de dos.
Quedando solos entre todos esos abrazos, todas esas miradas,
En la noche que nuestro amor crecio con cada beso,
Con cada roce de tu cuerpo, con cada caricia
Y con cada frase de amor,
hasta hacerse eterno en el tiempo
como un verso de amor.