Eres la luz que brilla sin ayuda,
una brisa marina en medio de la locura.
Eres bella con cada curva,
la Madre Naturaleza ama tu figura.
Muchos hablan de tu sonrisa inocente,
pocos saben de tu lado inteligente.
Leyendo a Neruda desnudas tu mente,
bailando al ritmo de un verso latente.
Sales enseñando tu barriga,
buscan tu desnudez sin saber ortografía.
Te pones ropa que abriga
y tu culo pasa a ser protagonista.
Te llaman “puta” por enseñar demasiado,
más quisieran ver ellos intimidando.
No entienden del contacto sin mando,
buscan controlar todo con sus manos.
Nadie comprende tu voz enfurecida,
pero todos te gimen a escondidas.
Se creen dueños de tus partes íntimas
y no son dueños ni de sus vidas.
Prestas atención al sabio con argumentos,
no sexualizas a una persona por su cuerpo.
Te atrae quien sin hablar te narra el cuento,
no quien dice amarte sin dedicarte su tiempo.
Que te llame para ir al teatro,
y que en la fila de atrás no te meta mano.
Que te saque a bailar despacio
y que su mano no resbale más abajo.
Tu cabello suelto, corto o ondulado,
tu estilo libre, sin censurar tu vestuario.
Tener sexo con quien aprecie tu ángulo,
libremente sin una fecha en el calendario.
Que valoren el sentimiento, no el deseo,
que valoren ambos, que te valoren con respeto.
Escribir en tu diario: caminé sin lazos;
solo yo y la libertad de ser un Ser Humano.
Sin temor a cruzarte con tu asesino,
sin un “haberte auxiliado”.
El miedo es el enemigo de tu enemigo,
por eso te agrede, tiene el ego desahuciado.
Que en la pista de baile no te pisen,
que tengas espacio entre bíceps,
que te dejen sonreír sin estar triste,
que te ayuden a superar tus cicatrices.
Crecer sin miedo al violador tarado,
al fontanero, al obrero en su trabajo,
a un jefe con tu sueldo en su nabo...
crecer con la belleza de un hombre desarmado.
Enamorado de la capacidad de tu parto,
das vida hasta con los labios sellados.
Llámame para caminar descalzos
por los prados de un mundo igualitario.
Tu cabello suelto, corto o ondulado,
tu estilo libre, sin censurar tu vestuario.
Tener sexo con quien aprecie tu ángulo,
libremente sin una fecha en el calendario.
Que valoren el sentimiento, no el deseo,
que valoren ambos, que te valoren con respeto.
Escribir en tu diario: caminé sin lazos;
solo yo y la libertad de ser un Ser Humano.
Enamorado de la capacidad de tu parto,
das vida hasta con los labios sellados.
Llámame para caminar descalzos
por los prados de un mundo igualitario.
Muchos hablan de tu sonrisa inocente,
pocos saben de tu lado inteligente.
Leyendo a Neruda desnudas tu mente,
bailando al ritmo de un verso latente.