\"La luna y yo nos parecemos, qué triste,/ lo de ella con el sol no se dará./ Yo nunca entenderé por qué te fuiste/ ni ella por qué el sol se va\".
Preguntan el porqué de mi soledad,
la razón de mi continua tristeza;
curiosean cosas relativas a mi edad;
a veces las contesto, otras las evado;
total, si estoy soltero o casado,
tan sólo a mí me interesa.
Trato de hablar con la verdad,
aunque a veces lágrimas me cuesta;
pero en las cosas de mi intimidad...
tan sólo tú figuras en ella,
diosa de mi alma, mi reina bella;
mi verdad, tú sabes que es ésta.
La razón de mi soledad tú la tienes,
porque no estás ahora a mi lado;
un dolor agudo penetra mis sienes
y hay un tormento en mi mente;
se me borra el tiempo, no hay presente,
ni futuro... ¿y a dónde se fue el pasado?
Yo tendré la edad que quieras ponerme,
puedo ser niño, joven o anciano...
Lo entenderé si no puedes creerme,
estoy enloqueciendo poco a poco
y no se le puede creer a un loco
que ya hasta se olvidó de que es humano.
¿Por qué siempre estoy triste?
¿Por qué me acompaña esta pesadumbre?
No lo sé, será porque me quisiste
y luego dejaste de hacerlo...será.
Trato de acostumbrarme, de olvidarte ya,
pero no me adapto a esa costumbre.
Tengo entre mis sienes un dolor profundo,
hay una lágrima contenida en mis ojos;
mucha nostalgia en mi vida, en mi mundo;
existe dolor en mis pensamientos,
de ver pisoteados mis sentimientos
por culpa de tus antojos.
Ya no quiero escribir más, no quiero;
es mucho dolor para un solo hombre;
de nada me ha valido ser sincero,
ni tratar de mantenerme cuerdo,
para borrar por fin de mi recuerdo
todas las letras de tu nombre.
Original de Álvaro Márquez
Caracas, Venezuela
Derechos reservados
Libro: http://goo.gl/YYLd72
Correo: [email protected]
Twitter: @poreros
Imagen: de Google