Entonces formulas tu discurso,
Tiras cada ladrillo
Cómo una celebridad sin elocuencia
Y una a una mentes vagas
Te siguen.
Pero tú ahí orgulloso,
Hablas de libertad y eres el primer esclavo
Hablas del mundo y vives exiliado.
Te crees muy adulto,
Menor de edad.
Pero no niño, no.
Ellos aprenden
Tu solo réplicas.
Entonces balbuceas ingenuo,
Escondido detrás del atril
Enfermo de emoción y melancolía
Sumido en el vicio de la rutina.
Te sientes solo con una espada
Enfrentando el mal de afuera
Con tu armadura de fe
Prédicas será la salvación
¡Escuchad! Solo tenemos que esperar
A que se acuerde de nosotros.
Ni luz pasa por tus cortinas
Quieres abrirlas y te encandila,
Te ciega, te quema
Ahora ni vendado estás
Pues tú elegiste la oscuridad.
Réplicas fe, pero en el negocio.
Ves en todos nosotros
El reflejo incesante
De tus deseos recurrentes.
Entonces nos quieres arrastrar
Al abismo oscuro que es tu mente
Tan profunda como un vaso
Tan grande como la mitad
Del mundo.
Y lo peor aún,
No eres uno solo.