De tu amor y mi amor, ¿qué nos queda?
La mordaz soledad tenebrosa,
con estela siniestra y brumosa
que silencio y dolor nos hereda.
Tus caricias tejidas con seda
ya perdieron su magia gloriosa;
sin que brille tu luz majestuosa
con la dulce sonrisa de Leda.
Se acabó la bonita opereta
que escribían tu amor con el mío;
y volvióse hecatombe, repleta
de mentiras, engaños y hastío;
que causaron la trágica grieta
que dejó tan terrible vacío.
Autor: Aníbal Rodríguez.