Josue81

El Amor de Dios

El Amor de Dios es la salida

para el alma que se encuentra herida.

Muchos años te has desviado

y vas al sitio equivocado.

 

Buscas fuentes que están rotas 

que solo te llevan a la derrota,

y tu vida así se embota

cual vida triste y sin nota.

 

Esa mujer pecadora 

a cual la gente nunca vota,

entra a la casa del fariseo

y la señalan con un dedo.

 

Pero allí está el Maestro

enseñando cual amado

Sus palabras traspasaron

y el corazón quebrantaron.

 

Enseguida saca el perfume

cual nardo puro exhalado

y aquellos murmuradores

comienzan con su descaro.

 

Hablan de la mujer

que riega el perfume a los pies

del Cristo que un día entró

en la casa del hombre aquel.

 

Comienza a ungir con sus cabellos

el cuerpo del Carpintero

y mientras sus lágrimas fluían

la multitud juzgaba y hería.

 

De pronto el Maestro habla

al fariseo en parábolas:

Dos hombres tenían deudas

que no podían pagarlas.

 

Los llamaron un día a cuentas

y se fueron como a tientas,

Uno debía cincuenta

el otro ni hablar la cuenta.

 

No sabían la sorpresa

que el prestamista le tenía

y ese día fué de fiesta:

le perdonaron las cuentas.

 

Ahora el Señor pregunta:

Cual deudor ama más?

El que debía cincuenta?

o al que ni hablar de la cuenta?

 

Es lógica la respuesta:

Al que más deuda perdonó!

y ahí comienza el Señor

Su discurso al corazón.

 

Entré a esta casa Don Simón

y no me diste un apretón

pero esta mujer no deja

de besarme el corazón.

 

Entré a tu casa y no lavaste

mis pies sucios cual desastre

y esta mujer no deja

de lavarlos con sus cejas.

 

Por lo tanto amó más

y el que más ama es al final

el que Dios un día perdona

y le coloca una corona.

 

No seamos como esa gente

que humilla al prójimo ante la gente

Ama a Dios y a tus hermanos 

y no mires al tirano.

 

Aquella mujer entendió ese día

que el perfume que Jesús más quería

no era el nardo caro que poseía

sino su corazón humilde que se partía.

 

Y esa mujer quedó en la historia

dejándonos en la memoria

Que el amor de Dios llena el alma

de aquellos que humilde se derraman.