Construiré un ático
en mi corazón
para envolverte en flama
y confiarte este fuego
cuando la luna emana,
ese relámpago de mí
trópico que reconozco
cuando me erizas la piel
y los versos se hacen poro.
Te imagino en cada rincón
con luz en tus caricias
tus ojos con inocencia
y el amor una primicia
en esta dimensión inversa
y la racionalidad en reversa.