El beso es un punto
que corta la frase.
Un final que reinicia
en otro final.
Un día y la noche
atados al alba.
Un sol y la luna
sin saber donde andar.
La luz y la sombra,
envuelta en mañana
y manos perdidas
pidiendo siempre más.
La lengua es una coma
que no deja manchas
y se unde soberbia
en la eternidad.
Por eso al amarte
soy coma y soy punto,
una diéresis herida
y frase sin punto final.