Las mascarillas nos tapan la boca,
las normas el corazón.
Ya nadie mi piel toca,
el covid es la explicación.
Recuerdos de una infancia loca
llena de desilusión.
Ahora ya no soy yo sola,
se esparce la cruel sensación,
aquella de alguien que implora
que detengan la razón.
Las mascarillas tapan la cara,
las normas frías son.
Ya nadie se asoma a la ventana
cantando una canción.
Los días pasan y sanan
o enferman de depresión.
A los trabajadores ya no alzan
por su bella y dura labor.
Cada uno en su casa
con su fría desilusión,
Pues el tiempo pasa
y no hay mejor opción.