La Pelota rendida a los pies del genio.
Se somete, obedeciendo, a cada toque.
La marca... fluye un acierto en cada roce.
Sus pies inspiran a soñar, qué alto ingenio.
Miren como se divierte, el genio mundial.
Vuela descalzo, baila, marcando el cielo.
Es un verdadero vencejo real, que trueno.
Maradona eleva la pelota, frente a su rival.
El adversario, bien enmudecido, entierra la cabeza.
Como recién nacido; queda desnudo, sin discutir.
En otro vasto intento fallido, solo le queda huir…
El abrupto terreno, es fiel testigo de su destreza.
Los gritos, rompen el cielo, el cual se desangra.
Con gotas de júbilo, remojan el campo, de emoción.
Cada gambeta, lleva su sello personal, de exaltación.
Como herido por bala de cañón… el arco sangra.
La inmortal pelota, atraviesa el agonizante arco.
Que muy herido, se desploma a tierra.
…Y la tribuna grita;
Goooool…