Hoy la vida me jugo una mala pasada,
Y aunque prometí sacarte de mi alma,
Cuando te vi sentí como si una daga me atravesara,
Y se me pierden hoy las palabras,
Se sepultan en tú mirada,
Quizá por eso no es necesario para mí decir nada.
Desde hace mucho que tu recuerdo me acecha,
Pero hoy se clavo como una flecha,
En mi alma ya desecha, que no te deja marchar.
Hoy la vida conmigo no a sido buena,
Cuando parecía que te iba a olvidar,
Te pone en frente mío donde no te pueda ignorar,
Los impulsos me gobiernan,
Y un denso frío me atormenta,
Y lo único que me provoca es escapar.
Quisiera no haberte visto,
Para no recordar lo que he sufrido,
Y dejar en el olvido, lo que por ti he vivido,
Y lo que sin tí debí pasar.
No se si fue suerte o casualidad,
Pero no tengo claro por que te vine a encontrar,
Eres ajeno a mis besos,
Soy ajena a tú corazón,
Cuando te iba a olvidar, y prometí no recordarte más,
Te vuelvo a encontrar,
Es cruel este dolor por que solo hace daño a mi corazón,
Tus pasos te alejan de los míos,
Y mi brújula me enseña otro camino,
Hoy a mi barco que creía estar ya firme y en tierra,
Lo envuelve una tormenta de la que no sabe escapar.
Quizá mi destino sea amarte en silencio,
Sola y en secreto hasta la eternidad.