Una sombra esquiva se niega a salir entre las sábanas
De senos recién nacidos, de labios húmedos, llenos de susurros
Una sombra esquiva vaga por mi alma
De piel intacta, entre mis yemas que delinean su figura
En esta alcoba llena de recuerdos, vives entre las nubes
Que han engendrado mis suspiros
Gemidos bajo el ocaso, murmullos en el crepúsculo
Que dibujan tu rostro, entre luces intemporales
Latidos de la lluvia entre el paisaje de tu cuerpo
Para beber del manantial que me ofrece tu vientre ingenuo
Para que bebas del mío, abrazada al deseo
Hasta desvanecernos entre besos, silentes de palabra humana
Una hoja que ha caído en el camino
La luna que ilumina el mar en su oscuridad
El tiempo que transcurre acariciando tus cabellos
Y tú sombra que es vereda, fontana y arenal
Una sombra esquiva, se niega a salir entre las sábanas
Mis dedos recién nacidos, que acarician su mar y su humedad
Mi cuerpo bebiendo el tuyo, entre miradas de incredulidad
Una sombra empapada de mi hombría,
Una sombra que me devuelve la vida