Dónde fueron ¡caramba! a mimetizarse las certezas
que ya no corren en paridad las líneas paralelas,
esas luengas distancias infinitas derrotan terquezas
y sin cantarinos amores no hay briosas zarzuelas.
Extraño virus coronado sangra hoy los estragos:
unos juzgan artificial la razón de las pandemias
aciaga resurrección acaso de renovados magos,
con Ciencia coqueta cargando fatigas de bohemias.
Génesis de seres originales hubo solo de dos sexos
y aparición repentina y pentagonal de la multi libido,
arrojando intensos como eróticos y diferentes procesos
sin reconocerse todavía lo natural ni qué lo prohibido.
Tierra Lìquida, dice culto e intuitivo Zygmunt Bauman
y sus enseñanzas afluentes globalizan las eminencias.
Cibernàticos niños no creen en Kripton ni en Superman,
adoran hipótesis mutantes, no teorías, no experiencias .
¿Qué urge hacer en este mundo de dolosas incertidumbres?
mutiladas sus creencias, Dios murió y aún los Superhombres,
aguardándose doctos saberes promitentes, veraces lumbres,
orantes de nuevos magos...en la adoración de sus nombres.