La imaginación para escribir poemas
se me acabó desde que dijiste
con tu voz dulce y sempiterna
si, tontito, soy tu eva.
Ahora describir solo quiero
este sentimiento que se apodera
de mis pensamientos
de mis emociones
y me eleva
hacia la inmensidad
de tu gracia camelera.
Eres bella,
la hermosura de tu rostro y cabellera,
se apoderan de mí
y me esclavizan y someten
amartelado a tu voluntad
como una hoja llevada por el viento
flotando en eterna suavidad.
Toma mi mano y confúndete conmigo
quiero acompañarte y estar siempre contigo
sentir que mi corazón late en tu pecho
y que a través de tus bellos ojos yo veo.
Te amo
es lo que siento
embelesado de tu sonrisa y de tu acento
y de esa forma tan maravillosa de decirme
bebito, tu y yo juntos siempre estaremos.