Pudo haber sido genial.
Sin embargo, la magia expiró
como la espuma.
Luchó, se aferró, pataleó,
se negaba a salir de aquel sueño.
Pero las olas, fueron cada vez más altas,
la mañana lo abofeteó con violencia
No despertaba....
El sueño se había apoderado de su cuerpo.
Impregnó su vida con fantasmas
Olía a mentiras otras veces parecían engaños
Ya era un prisionero de si mismo
Cuando quiso ser lo que no fue.