El día se acaba,
se va,
se aleja loco,
vuelve a besarme
mientras que vuela
desde el paseo
con los nogales,
las azucenas
color naranja,
los arces tristes
y las manzanas.
Otro domingo
vino y se fue
llegó despacio,
pasó volando,
lindo y brillante
para mi antojo
y mis deseos
que no corrijo
hasta encontrarte
solo conmigo.