La fuente con sonrisa transparente,
imagina lo sueños de un mancebo:
“Ah, que bella y sencilla está la fuente
similar al querer que dulce llevo,
Pues, me entregó mi amada los placeres
que solo a los amantes, las mujeres
de casta vestimenta y alma pura,
obsequian, y que amor y luz procura.
!Ah cuánto derramó de dicha plena
el vino que me embriaga el corazón!
No me dejas pensar, oh fuente llena
de sueños y perfumes! tu canción
de agua clara que su preciada frente
evoca, no me deja pensar, fuente”.
El viento de la tarde se desliza
sobre la fronda del ramaje espeso
mientras un canto eleva,cual se iza
la bandera en el asta de la gloria,
un misterioso y tan profundo beso.