Dailyn Arce

AƱoranza

A mi añorada Yanet, por ser tú, y nadie más…

A la suerte le escribo por no mencionarte,
si te pienso y te respiro, ¿dónde estás?,
al destino le imploro por no sentir que me faltas,
si te canto y te escribo, ¿dónde quedará el silencio?,
¿dónde se posará la esperanza si accedo a la despedida?
Volverás entre aleteos, mariposa encarnada de mi añoranza,
regresarás dejando solitaria la pared y los cuadros,
 los despojados sillones no llorarán de tanto extrañarte.
Amiga mía, entre tristes ilusiones evoco lo imposible,
si al menos de extrañarte mi dolor alcanzara,
para trazar la silueta de tu sombra, acariciar la sombra,
y no extrañarte más,
no perderte más.