Hace un par de días
te veo rezongona y esquiva,
no quieres hablar,
ven aquí, frente a frente
me dirás lo que te pasa
y lo vamos a aclarar.
Me dices ¡no aguanto más!
que te vas a marchar,
perfecto, estas en tu derecho
es tu vida, si no te vas a quedar,
di por lo menos la razón,
hasta ayer eras feliz
hoy, por el contrario
no dudas en decir “soy desgraciada”
si has dejado de quererme,
o amas a otro,lo comprendo,
¿porque vas a negarlo?
nadie maneja el amor.
Al verte así,
siento en el pecho un dolor
que me hace comprender,
el que sufrió aquella,
a la que un día dejé por vos,
Es el castigo que debo soportar
por hacer llorar,
a quien me dio su corazón,
y abandoné en busca de tu amor.
“El que las hace, las paga” dice el refrán
no tengo porque ser le excepción.