Original Oriflama Infinita

Niña de la caye / Camina la Luna... / Riqueza / Alquimia / El fuego eterno / Artemisa / El templo / Caen las gotas / Nuestro secreto / Qando / Todo soy / Un último baile / Preguntas y Respuestas

Era negra como el ocaso

Cuando cae la noche.

Flor de Luna de pétalos afilados.

Sigo roto desde entonces.

Recojo los pedazos

De mi alma, con cuidado de no hacerme cortes.

Un beso puede cambiar el universo

Aunque sea en un portal y sin aviso.

En la caye te robé un beso

Y un verde lo deshizo a palo limpio.

No se yevó mi amor el viento,

Sigue hoy aquí y conmigo.

La Luna da un briyo a mis versos:

El color de dos ojos negros y fugitivos.

 

Niña de la caye, el poeta

Está en la tierra para retratarte.

Tu movimiento teatral de felina salvaje,

Imagen para la rima perfecta.

Imagen ondulante, de humo alucinante

Que se perdió en el aire cuando me engañaste

(2015)

 

 

Liviana camina la Luna la vida

Y se eleva desnuda, bailando

Hace música la iluminada,

La poeta oscura, su sonrisa

Sensual un beso oculta.

Camina perdida la Luna, la única

Reconocida, laureada

Por su poesía,

Y se eleva vestida de luz azul

Como humo desde mi pipa.

Ebria de vida flipa

Formando dragones de fantasía

Del aliento que al viento suspira.

Camina sola la Luna, cabeza erguida, el taye recto,

Su boca todavía escondida me guarda dentro un beso.

Y me elevo solo como el fuego,

Alto Sol de nubes cubierto,

Vigilando através de un agujero en el cielo

El movimiento perfecto de su cuerpo

Cuando modestamente anda

Sin ir hacia nada

Perdida la esperanza,

Pero en este día volverá a ser amada

(2020)

 

 

 

 

Qué vale el oro de las minas,

La sangre del pueblo

Qué vale, qué verdad cabe en mentiras,

Qué vida en los muertos

Que apilan de noche

Sin nombre, sin fecha, sin familia,

Qué vale un pobre

Sin moneda, sin tierra, sin la risa

Que vibrar hace el hierro, la piedra

Qué vale sin el alma que la alegra,

La hierba, el agua, el devenir

Que siempre se me adelanta,

Y qué mi poesía, qué esta rima que delata

La riqueza que hay en mí

(2020)

 

Quemo toda la miseria en esta misma hoguera.

Convierto la tristeza y el drama en alas para volar

Sobre fronteras

Como ave inmortal

Si total ya se sabe que la soledad es demasiado grande...

Arden todos los males en una yama,

Arden las sangres mezcladas en agua.

Líneas rojas como estrofas flotan en el lejano horizonte,

Aves de viento, coronan el cielo, lo colman de colores.

Se acaba en la nada

El lamento, la maldad.

Me preparo para amar,

Me rearmo: soy una yama

Que baila, la noche no es demasiada,

He de crear mas, he de exhaltarme,

Saltaré al aire, seré transparente, un ave

Inmune a la muerte, trascendente alma

(2020)

 

 

 

Perseguido por los azares de sueños ignotos

Vagué yo hasta hoy, y la Verdad un tigre

Se me cruzó en la senda, Dios a lomos

Me dijo; solo el fuego eterno te hará libre.

 

Me perdí entonces en los desiertos fríos del ser

Donde hasta el agua no moja, está seca,

Las gotas dan en tierra hueca, hielan la piel

Como el eco del infinito, a oriyas de las estreyas.

 

Los escorpiones exhalando polvo de azufre

Esperan su presa con calma religiosa

A la sombra de una roca que al Sol cruje,

Bajo su vigilante mirada, mas se le escapa esa cosa

 

Que, horadando la arena, en pena, se arrastra.

Criaturas de sombra en lo negro acechan,

Así pican insuflan muerte en la brecha, matan

Amando sin pensar. Ni rituales, ni velas.

 

Pero para bestia el hombre, loco de pasión,

Que, indómito, mata mas que los depredadores

Temerarios de la selva profunda que él taló.

Mientras yo, triste y solo, reflexiono porque

 

Quiero arrepentirme del mal acumulado,

Pero algo me dice que todo lo que Dios

Ha creado, escapa al sentido humano

Y se afianza en su voluntad de perfección.

 

Y aun muerden las arenas mis pies descalzos,

Cuando todo ha oscurecido, soy yo camino

Mas cortante que el frío en los párpados

Que esta noche va anegando hasta dormirnos.

(2016)

 

 

 

 

 

 

Oh invicta

Amada mía,

Como el día

Formas estrictas

Aquí iluminas

Con tu risa

Pura y divina,

Oh Artemisa,

Amiga mía,

Amariya briyas

Como el día

En las mejiyas

Donde pensativas

Perlas crean tu vida,

De la vacía nada venida

A mi vida para que aquí vivas.

Mis lágrimas laminas

En almas como en plumas tus alas.

Realidades soñadas

Las levanta una brisa, una risa

Melodiosa, de primorosa primavera;

Esa risa que se besa en la floresta

Mi ser ahora se la imagina, es ésta

Que ahora será diosa, y se hará verdadera

(2017)

 

Descansando del mal letargo me perpetúo

En el fondo de estas rimas sacadas del polvo,

Abismo adonde todas las noches retorno,

Donde al fin hayo descanso y me camuflo

 

En lo oscuro. Es un templo, rojas paredes,

En el fondo veo, blanco, un gran altar en yamas,

Desde donde mi vigila mi misma mirada

Reflejada en la yama, roja y fulgente.

 

Siempre el mismo camino, el mismo cielo,

La misma fuente transparente, de sueño;

Aguas fluyendo desde el altar hacia mí.

 

Un agua que corroe por dentro los candados,

Que confunde por dentro el alma del diablo

Que soy, cuando Dios no anda por aquí.

(2016)

 

Simplemente tintinean solas,

Solas se entristecen y caen.

Muchas veces me consuelan,

Me elevan, y el viento me barre

Y caigo como eyas, trémulas

Velan, día frío sin tarde,

Moría lentamente la noche

Negra, aunque de niebla se disfrace

Cuando los destinos oscurece.

Pero, latente, el alma aun arde,

Aun cuando el hielo la encierra.

Sola se entristecen y nace.

Nacer hasta morir es el milagro,

Una visión en el trance,

Revelación de eternidad,

Secreta, es eya abrigándose,

Sola está triste, y cae.

Dios, qué camino he de abrir,

Subiré al sonar la clave,

El fuego, un rizo infinito,

En el vívido cantar del ave,

Mañana cantará mis hazañas,

Resucitaré tan grande

Y fulgente como el amor.

Mi alma se entristece y cae,

Vida, retal, yo quiero ser

Uno con Dios solo por soñarte.

Velando la muerte de la tierra,

Nada tan vivo como el aire.

(2016)

 

En tus ojos está el secreto,

En tus manos el misterio,

En tu pecho un cielo entero contenido,

Pero qué es aqueyo

Que te falta? El Amor, creo,

El calor de un cuerpo, o del mío

Mejor, la combustión del éter,

La solución que tengo en mente

Al problema que nos tiene tan introvertidos

Temiendo que toda esa gente

Que vemos, que oímos, no piense

Lo mismo. Mi idea es con noche irnos

Deprisa, sin que nadie nos vea,

Sin que nadie nos oiga, cuando todos sueñan

Vámonos, nadie vigila, los centinelas también se han dormido

En la hierba, venga, el camino espera, y la libertad

De andar sobre nuestras hueyas, de hablar de las cosas secretas

Mientra el círculo nos yeva de vuelta al fin al inicio.

Apurémonos a contra tiempo:

También lo eterno tiene término.

(2019)

 

Qando ennegrecía el cielo se veía el miedo... Ojos rojos entre la fronda oscura... Oh misterio profundo como la sombra!

Lo sentía y lo siento, cruza el cielo vespertino un espíritu despierto... Deja su reflejo, rojo como los ojos del miedo...

Estoy seguro, pacificando, predicando el Amor para traer el futuro al ahora.

Se va la sombra, la luz regresa, se expresa y transforma el color de las cosas, este ocaso ocasiona qando cae clarividente, candorosa.

Amor, si yueve es porque yoras. Estás triste visiblemente. Yo puedo aliviarte dándote el placer de saber quién eres.

Días despues la fiebre, el fragoroso deleite inmediato. Se va la muerte por otro lado y la vida aparece, siempre viene si es yamada.

Soy el guardián, el pilar de la sagrada montaña, el nómada de boca cerrada, el hermitaño que solo se apaña con nada.

Todo está en mi alma; beya, briya sobre las cayes mojadas; bajo esta fina yuvia, fría, inmortal se proclama, infinita luz en la oscuridad total.

Qando esclarezca la verdad y la real magia sea revelada el acecho de la noche cesará un siglo; por qué no pasarlo bailando unidos?

Vamos Amor dímelo, qal fué nuestro fayo mayor, el que nos hizo dividirnos, ser distintos, tú y yo?

(2020)

 

Todo el universo está aquí, conmigo.

Yo soy el universo, el momento que vivo

Sumergido en la soledad del todo.

Todo está unido; en cierto modo

Todo soy yo: lo que veo, lo que oigo,

Lo que siento, lo que pienso, lo que toco;

Todo es el producto de mi quietud,

Fruto de mi soledad: soy la luz

Donde no hay oscuro, soy el sonido

Donde no hay silencio; estoy solo conmigo

Porque solo existe el ahora, el momento

Que vivo despierto; mi sueño es un cerco,

Tendido todo a mi alrededor, que yo creo

O, mejor: que crea mi yo dormido. No estoy

Tan solo, conmigo mismo. Partido en dos

Yo soy el universo: roto corazón por el vacío,

Dentro avivo un fuego, echo de mi centro el frío

Infinito que soy. Debí dormirme en el limbo

De mi olvido, sí: así me volví a mi mismo desconocido

(2018)

 

Antes de que te acuestes a dormir

Y para siempre te olvides de mí

Quiero pedirte esta noche un último baile

 

En mi soledad no estoy solo yo;

Te noto cerca, observándome con paciencia

Y esperando a que te vea y me decida

A darte la vida...

 

La yuvia ha cesado; fuera el silencio

Es absoluto; el tiempo, obsoleto, ha colapsado

Todo en este momento, cuando tan claro te veo

Que me siento y soy el eterno fuego por tu amor...

 

No estoy nunca solo: oigo tu voz en mi interior...

 

La noche vuelve a caer sobre nosotros,

Me concederás un último baile antes del fin de todo?

 (2020)

 

Qué puedo contarte de mi vida

Que no se haya yevado ya la arpía esa desquiciada?

Qué voy a decirte, si no sé nada?

Se cayará mi alma? Jamás!

Qué otro dios sino el diablo que recita la verdad mientras te hablo?

Qué otro engaño creerme, cuando todo es falso

Como la muerte..?

Pregunto a los astros por qué no me han abandonado

Al suplicio del suicidio social...

Los veo medio apagados: el cielo entero está yorando, y yo debajo

Cojiendo la yuvia en mis brazos...

Por qué la luz del agua no daña mis ojos? Por qué perdido en los espejos

Vuelvo de los sueños en un rojo reflejo, en un fuego nuevo?

Interpreto este silencio, lo descubro y miro: del mundo frío me libero,

Y entro en mi mismo, solo en el abismo mas sombrío,

Aislado de los locos, un incomprendido espíritu anacrónico

(ahora)