Haz Ámbar

CORTINA AL SOL

Cuando un algo lúgubre

descubre el temor a la obsesión,

y de entre los silencios

salvaje ves que resurge

en mito mi tono

a esta hora;

todo germina repentino

muy ciclónico...

Las nubes que un viento

mueve vienen sobre el sitio

señalado para herir

mi beso sin daño alguno

por destino.

Corro porque sí,

sin huir de nadie,

si no hay peligro;

cuando escribo

sobre el papel

para aplacar mi grito 

y que la cara 

que a mí dirijas 

sea lo tan honrrada

de no exigirme más respuesta

que un tímido paladeo

y hacia dentro a mí mismo

con cariño un terrible insulto.