Te alejaste de mí una noche silenciosa
en el carro del delirio y de la locura,
lágrimas ibas sembrando de luz y de amor
por los mares de Marte y de la Luna.
El relámpago de tu mirada hería el viento
cuando cruzabas los zafiros de las alturas,
mientras el aroma colorado de tus pétalos
de alegre carmesí encendía la penumbra.
En los difusos brazos de las tétricas sombras
se evaporaron los destellos de tu hermosura
y el alarido del silencio se estremeció
en los trémulos labios de la noche sin luna.
Te alejaste de mí en los suspiros del viento
una noche llena de delirio y de locura
y te olvidaste de la pasión que bebimos
en los mares de Marte y de la Luna.
Aromas de nostalgia