Por la señal de la santa cruz
evocamos la muerte y resurrección
sentimos el amor de Jesús
y recordamos su crucifixión
porque, aunque nos cuidamos de nuestros enemigos
esperamos con fe que Dios nos libre de ellos
caminamos por senda de pecado convencidos
de que el amor es la mayor fuerza que mueve nuestros destinos
en el nombre de nuestros pensamientos, deseos y sentimientos
luchamos juntos por el amor verdadero,
ese ser maravilloso que nos cuida y protege sin pedir ni esperar nada.
Por eso querido amigo te asevero y no te miento
que Dios es el más grande de los compañeros
quien te protege y envuelve en su amor total
siempre sin esperar más nada
que, por tu propio esfuerzo, descubras la verdadera felicidad
siéndote absolutamente fiel hasta el final