Cuántas veces tengo que pedir perdón
por cosas que no son mi culpa
Cuántos disgustos he de pasar hasta
que mi poesía triunfe
Cuánto más ha de durar mi encierro
en una jaula
para verme tal cual se configura mi deseo
¿Ellos sí pueden ser guapos y felices?
¿Es que no hago, no doy de mí
lo suficiente todavía...?
Cómo serlo entonces si faltas tú
en mi vida siempre.
Cuántas veces ha de repetirse
la misma historia sin sentido
ni final que baste
para invocar algo de paz...
Cuándo terminará esta infatigable rutina
de agobiarme a mí el sentido
que lo tengo irremediablemente
puesto en ti, que eres quien
más y mejor podría
aclararme esta cuestión:
de una duda existencial
si es que verdaderamente se trata...