jorge enrique mantilla

La Novena y los Aguinaldos

La Novena y los Aguinaldos

 

Novena de aguinaldos, que alegran a rabiar las navidades

Novena de rezos, de ruidos de estallidos de pólvora, que despiertan las soledades

Sonidos de panderetas, que fisgonean a los amanecidos de curiosidades

Repicar de campanas en las iglesias, que acaban sosiegos y tranquilidades

Novena de aguinaldos en las madrugadas con café, que espantan las intimidades

Con rebosos y mantillas, las matronas y señoras, orondas de sus vanidades

Trasnochadas y madrugadas, las bancas de los templos esperan a feligreses y vecindades

Novena de aguinaldos, rezos con esmero y devoción, con todas las solemnidades

Piadosos y rezanderos, acuden a las iglesias, dando el diezmo de sus generosidades

Cánticos de villancicos, que alegran las madrugadas, del nacimiento de Jesús con sus finalidades

 

Cuenta la historia, desde el siglo dieciocho, las novenas de aguinaldos siguen sus tradiciones

El monje Francisco Jesús Larrea, vino de Quito al nuevo reino de Granada con nobles intenciones

Creó la novena de aguinaldos con sus rezos, las melodías de sus bellas canciones

En honor a los nueve meses de gestación del niño Jesús en María, la Virgen de su adoración

Colombianos y ecuatorianos, con sus emociones hermosas la conversación de sus ocasiones

Con fe y júbilo, nos trasporta al pasado, llenos de entusiasmo y satisfacciones

Tradición arraigada en el pueblo colombiano, llena de amor y de consideraciones

Los santandereanos, son los únicos que madrugan a las 4 de la mañana, a los templos con ahínco y reflexiones

Son nueve días de madrugadas, de la novena de aguinaldos con sus adorables bendiciones

 

En México y Centroamérica, las novenas de aguinaldos se llaman posadas

En honor a los nueve días de travesía, de la Virgen y San José de sus caminatas recordadas

Buscando refugio y posada para el alumbramiento de María, de dolores y llantos escuchadas

Las novenas de aguinaldos y las posadas, de villancicos con sus rezos exclamadas

Novenas que invitan a la reflexión, a la identidad de ser cristiano de alegrías despertadas

Preludio de oración a la llegada del nacimiento de Jesús, de tradiciones de siglos de iglesias visitadas

Del 16 al 24 de diciembre, finalizando con la nochebuena, de alegrías y regalos, de abrazos y cenas, de pavos y vinos de calores y fulgores rodeadas

 

Novena de aguinaldos, época de rezar y divertirse y dar agradecimientos

Época de jugar, apostando al amor, al júbilo y al jolgorio, alejando y espantando aburrimientos

Fiesta decembrina de citadinos y parroquianos, llenos de felicidad y razonamientos

Actividad dinámica y sana de divertirse en familia con sus entretenimientos

Los aguinaldos se remota a la costumbre de dar y recibir regalos de alegrías y gritos con sus espavientos

Imitando a los tres reyes magos, con juegos salidos del alma y sus encantamientos

 

Gritando con alegría y fuerte pasión, que retumbe, el eco ¡gané mis aguinaldos!

Jugando al sí y al no, las respuestas despistadas de sus olvidos

Pajita en boca, pidiendo al contrincante, que le muestre el hilo en la boca permanecido

Tres pies, manteniendo los pies juntos, evitando ser en un descuido sorprendido

Beso robado, se empieza como un juego entre amigos y vecinos conocidos

Y se termina enamorados, robando el amor de plegarias insistidos

Dar y recibir, sin descuidar al oponente de recibir regalos, de cartas y obsequios compartidos

El mudo, el que habla pierde, dejando de hablarle al oponente, de despedidas resistidos

Palmada en la espalda, estar en guardia y al distraído la palmada de gritos y dolores confundidos

Festejando, ¡gané mis aguinaldos!, apostando con los dedos meñiques, el juramento de aguinaldos de tradiciones y juegos divertidos

 

Juegos y apuestas de aguinaldos entre familiares, allegados y vecinos

Entre novios, amistades que surcan caminos de olvidos repentinos

En torno a las fiestas decembrinas, fortaleciendo los amores vespertinos

Recordando anécdotas del pasado y del ayer, siendo los aguinaldos siempre genuinos

Revivamos esta bella tradición entre nietos, taitas, suegros y sobrinos

Juegos de aguinaldos, que nos hacen revivir aquella hermosa juventud, sin avatares ni pergaminos

Vivamos alegres las fiestas de navidad y juguemos a los aguinaldos con emociones y con aquellos amores clandestinos

 

“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga diciembre 13-2020