En los recuerdos más profundos de una niña amedrentada persiste constantemente el destello de dos grandes flores .
Ellas eran su todo.
Compartian muchas cosas juntas.
Claro, éran muy distintas pero ciertamente éran felices...
En aquel suceso, ¿dónde se encontraban realmente?¿Lo sabían?
Preguntas tras preguntas asaltaban constantemente la mente de aquella desdichada.
\"Voy a buscar mi felicidad\", aquellas palabras se encontraban marcadas hasta el fondo de aquel desgastado corazón .
¿Lo lograste? ¿Eres feliz ahora?
Aquellas flores ocultaron la vergonzosa realidad para cuya pequeña no había esperanzas.
¿Te importe? ¿Verdad?
Éran las tres para todo, siempre juntas
Inseparables.
¿Por qué lo hicieron?¿Por qué me engañaron?
\"No te vayas\", dijieron aquella noche
\"Nos quedaremos contigo\".
Aquella niña, se encontró en un inevitable océano, sin esperanzas.
Abandonada.
En medio de un desierto sin fin.
\"Si, realmente te odio, pero aprenderé a borrarte del mapa, porque eso es más fácil que guardarte rencor\"
Esas fueron sus últimas palabras.
- Mel