Disturbia mi furia a los conspicuos
sumisos alacranes escarnecidos
Fulgiendo el ojo del faro o dios siniestro
sin esto que habla de mi el mismo
diablo que soy, os lo prometo, el mítico
Amor frenético de vivo desenfreno
su deseo desatado a todo, prisionero
y liberador, expansión del veneno
con el ritmo etílico en la voz del viento
y yo dormido cuando me desvelo solo
como castigo, y sin un amigo próximo
a mi calor tan frío en el fondo infinito
Si fantasioso me río y mino la salud
del loco que ocupó el trono de la luz
con su bastante oscuro culo gordo.
Pero yo tengo el bastón
y el poder de cambiar todo
de un momento a otro.
Mejor no joder con el Amor...
Lirios de luna fría y cadenas de espuma
donde bufa un dragón, a la sombra; él soy yo,
qué otra cosa? La vida es hermosa,
la tengo por esposa...y la beso entre las rosas
frías de luna y tiempo que no pasa nunca.
Y fuera la bronca, la disputa, que mi alma
ya está yena, de música, y fría como la luna
mientras arde entre la espuma...
No hueles este dulce aroma que rezuma
como la buena uva aún viva en mi copa...
y yo aquí, por un desliz, sin ropa
pero feliz asolas...aunque, Amor, me ayudas?
Traéme algo de yuvia...estoy tan caliente...
soy de oro candente, y derrito hasta al sol
con mi infinito fuego lo meto en fundición,
lo reforjo dentro de mis ojos,
lo recojo, él me hace rojo
y tan solo que yoro por su dolor
que es el mío propio...
Alguno de vosotros es doctor,
necesito opio
y pronto!
Fría la luna me está esperando,
cadenas de espuma crea mi yanto...
Ay! Me estoy quemando!
Y es por Amor!
Es monstruoso! Qué dolor!
Andar y no hayar reposo,
estar solo como dios...
Yo soy el mismo, uno distinto,
y distante, aquí, sin fin
y efímero...
Fría la luna con su silencio me lo ha dicho,
anoche, al fondo del abismo
el dragón antigüo
o fuego infinito.
Qué emotivo, es Amor, mi espíritu
motivó, así fuí movido
a hacerlo
bajo un cielo de ceniza y sueño
vigilando a la fría luna, atento mi ojo en el medio
del universo, que es tan pequeño
que en mí entero lo contengo todo y encadeno
a la espuma, lo hundo profundo en el mar
a otro mundo, mientras subo a buscar mis versos
de Amor (si los dejo sueltos volando
se me escapan de estas manos bravas,
menos mal que luego me salen alas) al cielo
y, cierto, no miento, ni estoy loco, ni tengo
un desequilibrio en el coco: soy como soy
y como yo no hay otro: fría la luna
besó mi frente y desperté, de repente,
y pude ver las cadenas de espuma,
cómo iban haciéndose, creciendo dentro de mi ser,
y expandiéndose saliendo desde mi mente fértil
de lirios resplandecientes, infinitos fuegos
que creé casi sí sin querer
De entre las tibias cenizas
Ave Fénix resucita trás su caída.
Primero se hace trizas
y luego vuelve a la vida.
Del fuego renace este fenómeno
de la física; se aferra al Amor
y salta como el agua purísima...
Un cuerpo erótico
repartiendo su calor,
y el Sol lo ilumina:
está solo como yo
y el dios que soy.
Fácil: entre las yamas briya
y así hazte infinita vida,
estreya en esencia, Ave Fénix
renace ya de tus cenizas
tibias como este día, que en ti
termina y comienza. Éxtasis,
ni te mueres, y vuelves a existir