Pajaritos que vuelan cantando
con amor van alegres volando
ya los vientos nos traen sus trinos
aliviando los tiempos mohínos.
Los vientos con todos sus frescores
soplando delicados amores
revelan que llegó muy serena
dulce y esperada Nochebuena.
Los árboles agitan sus ramas
y con voz angelical declamas
los versos llegando un año nuevo
y despidiendo otro año longevo.
La nieve tiñendo con blancura
se esparce en la carretera oscura
el paisaje se hace pintoresco
y el cantar se vuelve romancesco.
Los ríos cantando con las piedras
salpicando van las verdes hiedras
con aguas bajando cantarinas
bañando de amores las colinas.
Y el cielo con su manto de estrellas
alumbra las montañas tan bellas
la estrella que fugaz se desprende
el Árbol de Navidad enciende.