Los hechos son a veces cosa de una ruleta:
que uno nace estrellado y otros con estrella.
El estrellado siempre acaba en la cuneta
y el que nace con estrella:en la cama con ella.
La juventud martirio o \"divino tesoro\",
mas yo pienso que la mía fué un no poder.
Un no poder bochornoso acabose en lloro
y poco más que una lluvia querer esconder.
Y ya ni la escondo porque causa es perdida,
como perdida juventud sin ningún trofeo.
Una juventud desaprovechada y suicida,
mordida y tirada en el resucitar,me mareo.
Aquel amante de la vida,hoy apagado
en la cárcel más sombría,mi verso fiero
lo que me queda de tacaño y muy reservado:
perdida juventud como eterno compañero.