Hoy la noche está brumosa
fresca, triste y solitaria
hoy no luce estrafalaria
como aquella noche hermosa.
Sobre un ranchito de palma
está posado un lucero
y en el árbol un jilguero
de tristeza llora su alma.
El lucero está en el cielo
irradiando su ternura
con su luz tan clara y pura
luminoso como anhelo.
Y el gorrión está cantando
villancicos navideños
para todos los pequeños
que amorosos van soñando.
El árbol está frondoso
con sus hojas de colores
y el viento con sus olores
el ambiente hace amoroso.
Vamos canta, canta y canta
que al cantar se van las penas
que el canto rompa cadenas
que la vida te quebranta.